All Boys lo devolvió a la realidad

"El Turco" Mohamed cuidó algunos jugadores, pensando en la Copa Sudamericana, hizo cambios y la estructura de Independiente se resintió. Dio la sensación de ser un equipo anémico, demasiada ventaja para un rival rebosante de sangre fresca como All Boys. Fue victoria por 3 a 1 para los de Floresta, a todas luces merecida. El "rojo" licuó parte de los activos acumulados en el clásico con Racing y está obligado a superar el martes a los uruguayos de Defensor Sporting para no quedar otra vez con saldo deudor.

Mohamed sacó al arquero Hilario Navarro -figura excluyente contra la "academia"- para darle una chance a Adrián Gabbarini. Y fue una tarde nefasta para Gabbarini: le hicieron dos goles en 13 minutos -el segundo, obra de Juan Pablo Rodríguez, por su culpa- y poco después salió en camilla con traumatismo de cráneo, producto de un golpe. Lo internaron en un sanatorio por precaución.

El descuento de Facundo Parra, de cabeza, cuando terminaba el primer tiempo, puso en partido a Independiente. Pero apenas iniciado el complemento All Boys volvió a golpear por intermedio del zaguero Carlos Casteglione.

Con el 3-1 asegurado y ante la tibieza de Independiente, el conjunto de José Romero apostó por manejar la pelota y casi no pasó sobresaltos.

Empate con sabor amargo

Se le escapó sobre el final a All Boys. Cerca estuvo de conseguir su primer triunfo como visitante en el torneo, pero la suerte no estuvo de su lado. Lo ganaba merecidamente, por el gol de Jonathan Ferrari a los 31 minutos del segundo tiempo, pero en la última jugada del encuentro, Soplán puso el 1 a 1 definitivo, con que Huracán rescató un punto en la tarde de Parque Patricios.

Se mostró superior el conjunto de José Romero. Contó con varias ocasiones para ponerse en ventaja, pero falló en la definición. Hasta que Ferrari, tras un tiro de esquina, quebró la paridad.

Con la apertura del marcador, a menos de 15 minutos del final parecía sentenciado el juego. Porque Huracán no encontraba el rumbo para torcer la historia y All Boys se mostraba seguro con su juego. Pero cuando el partido se moría, llegó la igualdad que dejó un sabor amargo en los paladares del pueblo de Floresta.

Se le escaparon dos puntos valiosos a All Boys, ante un adversario directo en la pelea por la permanencia. Queda la bronca lógica por el triunfo que no pudo ser, aunque el buen rendimiento del equipo da tranquilidad, para trabajar pensando en lo que viene.

A sus plantas rendido un León

Otro fuerte golpe sobre la mesa dio All Boys, en la tarde de sábado de Floresta. Rompió el invicto de Estudiantes, al vencerlo por 2 a 1, con goles de Eduardo Domínguez y Sebastián Grazzini. Rodrigo Braña había igualado transitoriamente para los de Sabella, que se quedaron sin la punta del torneo.

Cantan, ríen y se abrazan los hinchas de All Boys, en el Malvinas Argentinas. Saltan, gritan, se miran entre ellos y se vuelven a abrazar. "Que Floresta es de Primera y de Primera no se va", rezan eufóricos desde esas tribunas repletas, que transpiran entusiasmo. Se ilusionan y no es para menos. El equipo de Pepe Romero consiguió otro triunfo de esos que hacen ruido, al superar a Estudiantes por 2 a 1. Y alimenta con buenos argumentos su sueño de afirmarse en la máxima categoría. El León de Sabella perdió por torneos locales después de 17 partidos. El Albo lo hizo.

El local se puso en ventaja a los 29 minutos, cuando Eduardo Domínguez definió de zurda, luego de que Fernando Sánchez le bajara con la cabeza una pelota en el área. La paridad llegó en la última jugada del primer tiempo, cuando Rodrigo Braña venció con un cabezazo el arco de Cambiasso. Pero a los 4 de la segunda parte, apareció Sebastián Grazzini. El ex Racing aprovechó una desatención en la defensa de Estudiantes y definió con jerarquía por arriba del cuerpo del arquero Orión, para marcar el gol del triunfo y desatar la locura en Floresta.

Crece All Boys partido a partido. Consiguió su tercer triunfo consecutivo como local y engrosa su promedio. Con estos tres puntos salió de zona de promoción y mira el futuro con entusiasmo.

El Albo y su Santa Fe

Eso que parece ínfimo, esos pequeños pasos pueden resultar gigantes a la hora de definir un objetivo. Puntos como el que se trajo All Boys anoche desde Santa Fe pueden ser determinantes al final de la temporada. Con su empate 1 a 1 ante Colón, el equipo de Pepe Romero sumó de visitante por primera vez en lo que va del torneo y alimenta su ilusión de quedarse en la máxima categoría.

Sólo 7 minutos se jugaban cuando la visita sorprendía al conseguir la ventaja con el penal de Mauro Matos. Desde ese momento el Albo buscó sacar provecho de la desesperación de su adversario. Con orden supo esperarlo y buscó de contraataque complicar a la defensa de Colón con la movilidad de Ereros y Pérez García, y un afilado Matos como referencia en el ataque. Y más allá de que el ingreso de Damián Díaz por Candia le aportó fútbol al equipo de Mohamed, se repitió en centros aéreos el local para buscar generar peligro sobre el arco de Matías Giordano. Y fue desde uno de esos envíos que llegó la igualdad, cuando a los 8 de la segunda parte, el Bichi Fuertes de cabeza logró el 1-1 decisivo.

Buscó el triunfo Colón, pero con más empuje que claridad, y pese a sus embates no logró romper la paridad. Supo aguantarlo el conjunto de Floresta, que se llevó un valioso punto desde el Cementerio de los Elefantes y mira hacia adelante con una fe sagrada.

Con Soto y algo más

José Romero está chocho, y no es para menos. Luego del triunfo ante Olimpo, rival directo en la lucha de abajo, Pepe ya tiene la cabeza en Colón.

Por eso, esta mañana hará la práctica de fútbol en Floresta y comenzará a diagramar a los once. De movida, habrá una variante segura: regresará Soto, tras la sanción, en lugar de Panceri. ¿La duda? Saber si mantiene el 4-3-1-2 o vuelve (con Fernando Sánchez por Pérez García) al 4-4-2.